Ante las devastadoras inundaciones que han dejado al menos 44 muertos y cientos de damnificados en cinco estados del país, la presidenta Claudia Sheinbaum inició este domingo una gira por Puebla, Veracruz e Hidalgo para supervisar los daños, respaldar a los afectados y adelantar los planes de apoyo que desplegará el gobierno federal.
Durante el recorrido, Sheinbaum reiteró su compromiso con las comunidades asoladas por las lluvias y afirmó que, una vez que los caminos sean reabiertos, se llevará a cabo un censo de afectaciones para definir los apoyos necesarios. “No vamos a dejar a nadie desamparado”, aseguró la mandataria en un video difundido por sus redes sociales.
De acuerdo con la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), los fallecimientos reportados se distribuyen de la siguiente manera: 16 en Hidalgo, 18 en Veracruz, 9 en Puebla y 1 en Querétaro. En total, 111 municipios en los estados de Puebla, Veracruz, Hidalgo, San Luis Potosí y Querétaro han sido identificados con afectaciones que requieren atención prioritaria.
En Veracruz se han registrado 69 municipios afectados, con atención prioritaria en localidades como Álamo Temapache, Poza Rica, Tuxpan, El Higo, Tempoal e Ilamatlán. Hasta ahora hay cerca de 42 refugios temporales activos, que acogen a más de 3,155 personas. En Puebla hay 37 municipios con daños graves y 83 refugios en operación, aunque no se precisó el número total de personas atendidas. En Hidalgo, los municipios más golpeados son Zacualtipán, Huazalingo y Tianguistengo; solo en Juárez Hidalgo hay un refugio que hospeda a siete personas.
Las inundaciones se generaron entre el 6 y el 9 de octubre por la confluencia de los huracanes Raymond y Priscilla en el Pacífico junto con sistemas atmosféricos en el Golfo de México, lo que provocó lluvias que superaron los 1,800 milímetros en algunas zonas.
Para hacer frente a la emergencia, el gobierno federal activó el Plan DN-III-E (Ejército) y el apoyo de la Marina. Desde el viernes 10 de octubre se instaló el Comité Nacional de Emergencias, que se ha mantenido en sesión permanente para coordinar las tareas de auxilio.
Sheinbaum señaló que participarán más de 6,000 elementos del Ejército y unos 3,000 de la Marina en labores de auxilio y limpieza. También se dispondrán unas 250 máquinas de la Secretaría de Infraestructura, Defensa y Marina para abrir caminos y restablecer vialidades bloqueadas.
En Huauchinango, Puebla, considerado uno de los municipios más afectados, se instalarán brigadas de limpieza, se habilitará una planta potabilizadora y se instalarán cocinas comunitarias para atender hasta 10,000 personas durante la contingencia. En Poza Rica, Veracruz, el gobierno federal y estatal prometieron apoyo alimentario, de agua potable y recursos para limpiar escombros.
Uno de los desafíos inmediatos es la apertura de caminos hacia comunidades aisladas. Hasta ahora, de 108 interrupciones en carreteras federales, 103 han sido atendidas y restan 5 por resolver. También se ha hecho un llamado a quienes no localizan a familiares para que llamen al 079, línea habilitada para atención y rastreo de personas.
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