Diane Keaton, falleció este sábado 11 de octubre a los 79 años en su residencia en California, Estados Unidos. La noticia fue confirmada por su familia a través de un comunicado difundido por medios como People, en el que se pidió respeto y privacidad durante este difícil momento.
Aunque la causa oficial de su muerte no ha sido revelada, fuentes cercanas a la actriz señalaron que su salud se deterioró de manera repentina en los últimos meses. Diane Keaton había enfrentado diversos problemas de salud a lo largo de su vida, incluyendo cáncer de piel y trastornos alimenticios como la bulimia, condiciones que abordó con franqueza en entrevistas y publicaciones.
En sus últimas semanas, Keaton se mantuvo alejada de la vida pública. Dejó de realizar actividades cotidianas como pasear a su perra Reggie, algo que solía hacer a diario en su vecindario de Brentwood. También sorprendió al poner en venta su casa de ensueño en Los Ángeles, una propiedad que había remodelado durante ocho años y que consideraba su refugio personal.
Trayectoria
Nacida como Diane Hall el 5 de enero de 1946 en Los Ángeles, California, adoptó el apellido de soltera de su madre para su carrera artística. Su trayectoria comenzó en el teatro, destacando en Broadway con obras como Hair y Play It Again, Sam, esta última escrita por Woody Allen, con quien mantuvo una estrecha colaboración profesional.
Su salto al estrellato llegó con El Padrino (1972), dirigida por Francis Ford Coppola, donde interpretó a Kay Adams, la pareja de Michael Corleone (Al Pacino). Repetiría este papel en las tres entregas de la saga, consolidándose como una figura clave en una de las franquicias más influyentes del cine.
En 1977, su papel en Annie Hall —una comedia romántica dirigida por Woody Allen— le valió el Premio Óscar a Mejor Actriz, además de un Globo de Oro y un BAFTA. Su interpretación de una mujer excéntrica y encantadora marcó un antes y un después en el cine contemporáneo, y su estilo bohemio —pantalones anchos, sombreros fedora y corbatas— se convirtió en un ícono cultural.
Diane Keaton no solo brilló como actriz. También se desempeñó como directora, productora, escritora y fotógrafa. Publicó varios libros, incluyendo memorias y colecciones fotográficas que exploraban temas como la arquitectura, la identidad femenina y el envejecimiento.
A lo largo de su vida, se mantuvo firme en sus convicciones. Rechazó someterse a cirugías estéticas, defendió la autenticidad en la industria del entretenimiento y se convirtió en una voz influyente en temas como la salud mental y el empoderamiento femenino.
Nunca se casó, pero fue madre adoptiva de dos hijos, Dexter y Duke, a quienes crió con devoción. En entrevistas, habló abiertamente sobre su decisión de formar una familia fuera de los convencionalismos, y sobre cómo la maternidad transformó su vida.
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