Demetri Mitchell, futbolista inglés de 28 años, ha sorprendido al mundo al convertirse en el primer jugador conocido que negoció su contrato profesional sin agente, utilizando ChatGPT, una herramienta de IA desarrollada por OpenAI.
Mitchell, formado en las categorías juveniles del Manchester United, ha tenido una carrera que lo ha llevado por diversos clubes del Reino Unido, incluyendo Hearts, Blackpool, Hibernian y Exeter City. En el verano de 2025, tras quedar libre, recibió una oferta del Leyton Orient, equipo de la tercera división inglesa (League One). Sin representante y buscando optimizar sus recursos, decidió confiar en la tecnología.
“Me enviaron una propuesta y comencé a usar ChatGPT, preguntándole cómo negociar el acuerdo y qué debía responder”
Explicó Mitchell en el pódcast británico From My Left. Para obtener una respuesta útil, compartió con la IA detalles como su salario anterior, el costo de mudarse a Londres con su familia, y sus expectativas económicas.
La IA le ayudó a redactar una respuesta profesional, clara y convincente. El resultado fue una mejora salarial significativa y una bonificación por la firma del contrato, todo sin pagar la tradicional comisión del 5 por ciento que suelen cobrar los agentes deportivos.
“ChatGPT ha sido el mejor agente que he tenido en mi carrera. Las comisiones suelen rondar el 5%, mientras que ChatGPT solo me cuesta 15 libras al mes”
Más allá de la anécdota tecnológica, Mitchell aprovechó para reflexionar sobre las dificultades económicas que enfrentan los futbolistas fuera de la élite.
“La gente cree que todos ganamos fortunas, pero no es así. Un jugador de la League One puede ganar entre 2 mil y 3 mil libras por semana, igual que un médico, pero sin la seguridad de ingresos a largo plazo”.
También señaló los gastos ocultos que enfrentan los jugadores: hipotecas, mudanzas, coches, y el hecho de que sus parejas muchas veces no pueden trabajar debido a los constantes cambios de ciudad.
El caso de Mitchell ha generado interés en el mundo deportivo y tecnológico aunque su protagonismo en el campo ha sido limitado —nueve partidos disputados, tres como titular y sin goles ni asistencias—, su historia fuera de las canchas ha captado la atención de medios y aficionados: ¿Podría esta práctica convertirse en una tendencia? ¿Estamos ante el inicio de una nueva era donde los jugadores gestionan sus carreras con ayuda de algoritmos?


