Un niño de 11 años murió en Houston, Texas, tras recibir disparos luego de que, como parte de una broma, tocara el timbre de una casa y huyera corriendo. El menor fue alcanzado por las balas disparadas por un hombre que salió del domicilio, informó la policía la noche de este domingo.
De acuerdo con un comunicado del Departamento de Policía de Houston, el menor había practicado este “juego” en repetidas ocasiones la noche anterior, acompañado de otros niños. La dinámica consiste en tocar la puerta o el timbre de una vivienda y huir antes de que los habitantes logren abrir.
Las autoridades confirmaron que el niño falleció a causa de las heridas provocadas por los impactos de bala. Hasta la noche del domingo no había personas detenidas, señaló Shay Awosiyan, portavoz del Departamento de Policía, quien añadió que agentes continúan investigando para dar con el responsable.
No es la primera vez que un hecho similar ocurre en Estados Unidos. En mayo pasado, en Virginia, un hombre fue acusado de asesinato tras disparar contra un adolescente de 18 años que realizaba la misma broma para grabarla y subirla a TikTok.
Aunque este tipo de juegos han resultado mortales en distintas ocasiones, no existe un decreto que los prohíba o sancione de manera específica. Sin embargo, en ciertos casos pueden configurarse como acoso si se repiten en un mismo domicilio, o incluso como delito cuando generan daños materiales o personales.
En otros países, como el Reino Unido, esta práctica conocida como ding dong ditch no está prohibida como tal, aunque sí puede derivar en sanciones legales. En Inglaterra y Gales, el “Town Police Clauses Act de 1847” establece hasta 14 días de prisión para quienes perturben intencionalmente a los habitantes de una vivienda tocando el timbre o golpeando la puerta.


