Carlos “Gullit” Peña, conocido por su participación con la Selección Mexicana en el Mundial de Brasil 2014 y por formar parte de equipos como el Club León y las Chivas del Guadalajara, fue detenido la tarde del lunes 30 de junio por conducir en estado de ebriedad en calles de la colonia El Coecillo, en León, Guanajuato.
El incidente ocurrió alrededor de las 14:00 horas, cuando agentes de Tránsito Municipal detectaron que un Mini Cooper negro circulaba de forma errática en el cruce de la calle San Cayetano y el bulevar Vicente Valtierra. El vehículo zigzagueaba, derrapaba, se acercaba peligrosamente a las banquetas y a otros automóviles, lo que motivó a los oficiales a intervenir de inmediato.
Al acercarse al conductor, los agentes notaron un fuerte aliento alcohólico. Tras solicitar el apoyo del alcoholímetro, se confirmó que Peña presentaba 2.0 gramos de alcohol por litro de sangre, cuadruplicando el límite legal permitido de 0.5 gramos. Este nivel fue clasificado como “ebriedad completa”, lo que, según el reglamento municipal, amerita arresto inmediato y no puede resolverse con una simple multa.
Testigos del operativo grabaron parte del momento en que el exjugador intentaba hacer tiempo hablando por teléfono, aparentemente buscando ayuda o retrasar su detención. Sin embargo, los oficiales actuaron conforme al protocolo y procedieron con su arresto.
Carlos Peña fue trasladado a los separos de la Delegación Norte, donde permaneció 20 horas detenido. Fue liberado la mañana del martes 1 de julio, alrededor de las 10:00 horas ,tras cumplir con la sanción correspondiente. Su vehículo fue remitido al corralón de Tránsito Municipal.
Tras su paso por equipos como León, Chivas, Cruz Azul y Rangers de Escocia, la carrera de Peña ha tenido altibajos constantes que han empañado la carrera del mediocampista tamaulipeco. A pesar de haber sido considerado una de las grandes promesas del fútbol mexicano, en los últimos años, ha militado en equipos de menor categoría tanto en México como en el extranjero, sin lograr recuperar el nivel que lo llevó a la élite del fútbol nacional, marcando su trayectoria por problemas de indisciplina y adicciones, especialmente al alcohol.
Hasta el momento, Carlos Peña no ha emitido declaraciones públicas sobre el incidente. Tampoco se ha pronunciado ningún representante legal o familiar. En redes sociales, el caso ha generado una ola de comentarios, muchos de ellos lamentando que un jugador con tanto talento haya desperdiciado su carrera por problemas personales.


