Puebla dio un paso hacia el desarrollo energético con la inauguración de la primera fábrica poblana de paneles solares, Tonalli, ubicada en el municipio de Cuautlancingo. El gobernador Alejandro Armenta Mier encabezó la apertura de la planta, que en su primera etapa implicó una inversión de 325 millones de pesos y busca dotar de energía a escuelas, hospitales y comunidades que carecen de electricidad.
Durante el evento, Armenta señaló que esta iniciativa no solo representa una apuesta por las energías limpias, sino también por el crecimiento económico local. En esta primera fase se prevé la generación de más de 200 empleos directos y más de 2 mil indirectos.
“El objetivo es que esta planta tenga la capacidad de producir hasta 200 mil paneles solares al año, para instalarse en más de 800 escuelas en un año y medio, priorizando aquellas que actualmente no cuentan con energía eléctrica”, explicó.
A largo plazo, el gobierno estatal pretende instalar paneles solares en las 14 mil 500 escuelas públicas del estado como medida para reducir el consumo eléctrico y promover el uso de energías renovables.
Armenta también hizo un llamado a los migrantes poblanos a invertir en este proyecto, destacando que representa una oportunidad para regresar a sus comunidades y “dejar atrás los malos tratos del gobierno de Estados Unidos”.
Por su parte, el empresario Bernardo Álvarez, quien participó en la creación de la fábrica, explicó que la planta Tonalli cuenta con tecnología de punta y su producción está pensada tanto para el sector social como para integrarse en cadenas de innovación tecnológica. En tanto, el director de la Agencia de Energía, Rodolfo Camacho, subrayó que el proyecto se alinea con la visión nacional impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum y convierte a Puebla en un referente nacional en materia de energía limpia.


