El Banco Mundial recortó su expectativa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México para 2025 en 1.5 puntos porcentuales, debido a un entorno externo menos dinámico, así como a la incertidumbre sobre las políticas comerciales de los principales socios del país.
La baja en las proyecciones se dio a conocer a través del Reporte Económico de América Latina y el Caribe (Latin America and the Caribbean Economic Review, LASER, por sus siglas en inglés), en el cual se señala que, aunque en octubre se preveía un crecimiento del 1.5% para México en 2025, ahora se anticipa un crecimiento del 0%. Asimismo, la proyección para 2026 se redujo al 1.1%.
Las perspectivas económicas mejoran para 2027, año en el que se prevé un repunte del 1.8%, impulsado por un realineamiento económico asociado al fenómeno del nearshoring. El estudio también toma en cuenta la incertidumbre persistente en la política internacional desde 2015.
Con este informe, ya son tres los organismos internacionales que ajustan a la baja el crecimiento de México. Los otros dos son la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), los cuales, desde marzo, habían anticipado un crecimiento económico nulo para el país.
“Si bien esta mayor integración ha creado amplias oportunidades para las empresas y los trabajadores de la región, también significa que una proporción significativa de los trabajadores está empleada en industrias exportadoras y, por ende, está expuesta a posibles vaivenes del comercio internacional”, advierten los reportes.
En contraste, América Latina y el Caribe registrarán un crecimiento del 2.1% en 2025 y del 2.4% en 2026, lo que convierte a la región en la de menor crecimiento a nivel global. Las causas principales son el elevado endeudamiento y un entorno externo permanentemente cambiante, factores que dificultan el desarrollo económico sostenido.
En el caso de México, el crecimiento nulo también se relaciona con los déficits fiscales que persisten desde la pandemia de COVID-19, a pesar de las medidas implementadas en años recientes. A ello se suman las políticas arancelarias impuestas por Estados Unidos, que generan incertidumbre en los mercados locales.
No obstante, México ha mostrado avances en el combate a la pobreza, logrando una disminución del 8% entre 2018 y 2023, gracias a los programas sociales y al aumento en los ingresos laborales de la población. A pesar de ello, el sector informal continúa siendo el principal empleador del país, lo que limita los avances en productividad real.
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